A mediados de 2003 comencé a emborronar libretas futboleras que acabaron por convertirse en sugerentes manuscritos. El desinterés de las editoriales y las intentonas fallidas en los concursos recortaron las ilusiones y atrajeron al desengaño. Nueve años y muchas fotocopias después, en junio de 2012, se publica "EN DOBLE FILA" y en diciembre "TRES RELOJES DE ARENA". Para celebrarlo alquilé este ático abuhardillado y virtual. Os espero dentro.
- Si es tu "PRIMERA VEZ" pincha en el rincón de la PRIMERA VISITA y date un paseo por los ENLACES.
- Si te interesa hacer algún comentario en las páginas o en el mesario, consulta el rincón de los COMENTARIOS.
(También me puedes encontrar en jagarzu@yahoo.es, jgzuazo64@gmail.com y javier.zuazo.71@facebook.com.)
- Si te interesa hacer algún comentario en las páginas o en el mesario, consulta el rincón de los COMENTARIOS.
(También me puedes encontrar en jagarzu@yahoo.es, jgzuazo64@gmail.com y javier.zuazo.71@facebook.com.)
25 septiembre 2012
COMENTARIOS
Tenemos problemas con la sección de comentarios. Sé de varios amigos que quisieron insertar alguno al final de una entrada y no pudieron. La única que lo hizo, Loli, me comentó que no fue fácil. Problemas de ingeniería de nuevo. Mientras se solucionan, podéis enviarlos pinchando "anónimo" (y firmándolos al final o al principio del mismo) en el menú que aparece adosado a "comentar como"; luego seguramente os pedirá repetir un código de esos encriptado para evitar cosas raras. De momento podemos ir tirando así.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Comentario de Isabel Camblor. Ya que no ha podido insertarlo, lo hago yo por ella.
ResponderEliminarMe gusta tu blog. Recordar a alguien que existió en algún momento y conjurarlo me parece una ceremonia muy romántica. Me gustan tus pensamientos, la gente que descubro entre ellos, me gusta el cuarto desordenado con el espejo que reproduce nuevos cuartos desordenados. Me parece mágico que el café del Oihuka no esté servido en vaso ni en taza, sino en taza-vaso.
Me gusta que seas consciente de que tus peripecias son lo suficientemente singulares como para decidirte a compartirlas, “La soledad de las vocales”(pag.12)
Me gusta la farmacéutica, los desengaños, el espejo del ascensor, Unamuno. Me gusta un amigo tuyo al que detesté durante un par de días y ahora, mira, me cae bien, el hombre, que al parecer destripa CACHARROS. Si nos prometes que nos esperas dentro, entraré a menudo, Poeta.